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Amitabha con dos bodhisattvas y músicos celestiales
Complejo de cuevas de Mogao, cueva 251
Cerca de Dunhuang, China
Periodo Wei del Norte (386-581 dC)
Tinta y pigmentos minerales


El culto a Amitabha representa un acontecimiento decisivo en la historia del Budismo. Constituye un de las formas más simples de meditación budista y, por esta razón, se volvió tremendamente popular por toda Asia. La base doctrinal del culto a Amitabha, Buda de la Sukahavati o "Tierra Pura", es el Sukahavati-vyuha, un sutra traducido por primera vez al chino en el año 147 dC, aunque las traducciones más famosas son las de Kumarajiva (344-413 dC) y Xuanzong (600-660 dC).

El culto a Amitabha hizo grandes progresos en China durante el siglo V, después de ganar popularidad en Asia Central en los siglos precedentes. Se extendió especialmente entre la gente sin educación, ya que no eran necesarios conocimientos profundos de la doctrina budista. Todo lo que requería de sus practicantes era que se comprometieran a repetir un gran número de veces el nombre de “Amitabha” mientras interiormente invocaban una visión interior del Buda sentado en su Paraíso Occidental de la Tierra Pura. Cualquiera que demostrar su fe y total devoción a Amitabha tendría garantizado el renacimiento en esta Tierra Pura.

Las imágenes pintadas de Amitabha en su paraíso proveen a los practicantes de un modelo en el que basar sus visualizaciones, y se basan en las descripciones de la Tierra Pura que se encuentran en el Sukahavati-vyuha y otros sutras. Muchas, como este mural de la cueva 251, representan a Amitabha dando un sermón frente a un estanque de lotos (las almas de los fieles renacen dentro de flores de loto), flanqueado por dos bodhisattvas, Avalokitesvara (que lleva una imagen en miniatura de Amitabha en su tocado) y Mahasthamaprapta (cuyo tocado a menudo se decora con una pequeña pagoda). Músicos celestiales y bailarines vuelan por encima y alrededor de Amitabha, regocijándose por su bondad y compasión.

Traducción de Alexandra Prats, revisada por Dolors Folch