Pan-Hispanic Ballad Project
Total: 6
0818:6 Presagios del labrador (é-a) (ficha no.: 8222)
Versión de Asturias s. l. (ay. Laviana, p.j. Laviana, Asturias, España).
Documentada en o antes de 1885. (Archivo: AMP). Publicada en Romancero asturiano, tomo II (en prensa) y Petersen-Web 2006, Texto. 039 hemist. Música registrada. |
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Estando un labrador labrando, procurando a Dios su hacienda, |
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oyó una voz que decía: --Mancebo, vete a tu tierra, |
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que tienes la mujer moza, puede hacerte alguna ofensa.-- |
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Deja la mula que corre, coge el caballo que vuela, |
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la andadura de tres días andúvolo en hora y media. |
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Allegar a su casa alendó muy mala seña, |
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halló las puertas cerradas, las que siempre están abiertas; |
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por afuera están con llaves y por dentro con cadenas. |
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Sacó un puñal que traía y con él rompió una puerta. |
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--Pues si cabe el mi caballo también cabrá mi cabeza.-- |
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En el piso de la casa encontró zapato y media. |
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--Ahora voy a la cama por ver quién estaba en ella.-- |
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Estaba el galán con la dama, |
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le dio siete puñaladas, que de la primer muriera. |
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--Ahora voy a la dama, que el galán ya bueno queda. |
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¿Estás ahí, perra traidora, estás ahí, traidora perra? |
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¿Qué te faltaba de mí para hacer tan grande ofensa? |
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Si te faltó qué comerahí tienes mi panera; |
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si te faltó qué beber, ahí tienes mi bodega. |
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¡Caiga un rayo que me parta del cielo de los planetas!-- |
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¡Válgame el señor San Pedro, la bendita Magdalena! |
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Notas: -6b alendó sic. Original ms. de letra no identificada (¿Eladio Jove?), "nº 40". Nota del colector: -10a caballo, "Yo creo sea puñal en vez caballo".
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0818:4 Presagios del labrador (é-a) (ficha no.: 1959)
Versión de Las Navas (ay. La Aldehuela, p.j. El Barco de Ávila, ant. La Aldehuela, Ávila, España).
Recitada por Josefa. Recogida por Ramón Menéndez Pidal, 00/00/1905 (fecha deducida) (Archivo: AMP; Colec.: María Goyri-Ramón Menéndez Pidal). Publicada en IGR-vulgar 1999, pp. 103-105 (tipo B). 116 hemist. Música registrada. |
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La rueda de la fortuna nunca se pudo estar quieta, |
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de media roda que distes me trajistes a esta tierra; |
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no me pesa haber venido ni tampoco estar en ella, |
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que he visto la mejor dama que cria naturaleza, |
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asomadita a un balcón, muy adornada y compuesta. |
6 |
La dije: --Señora dama-- como si la conociera. |
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--Déme un clavel, si ella quiere, de esos que tiene a par della. |
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--¡Mira cómo me le pide el pícaro sin vergüenza! |
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--Calle usted, señora dama, que es al uso de mi tierra, |
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los galanes como yo regalan a las doncellas, |
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ellas nos dan para guantes, y acá pa zapato y media. |
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--Si quiere conversación suba arriba la escalera.-- |
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No acabó de prenunciarlo, cuando ya se plantó en ella. |
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La dama cerró el balcón y el galán cerró la puerta; |
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las vecinas, que lo vían, decían: --¡Poca vergüenza!. |
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--Mi marido no está en casa, que está a recoger su hacienda.-- |
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Y el corazón le decía: --Vete a tu casa y no vuelvas, |
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que tienes una mujer que te hace dos mil ofensas. |
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--¿Cómo podía ser eso, si mi mujer es tan buena?. |
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--Deja el caballo que corre, coge la mula que vuela; |
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ves dejando los caminos, ves cogiendo las veredas.-- |
22 |
Al entrar en la ciudad su casa está la primera. |
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Todo lo ha hallado cerrado, lo que no se usaba en ella; |
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con un puñal que traía hizo un bujero a la puerta, |
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primero metió los pies, luego metió la cabeza, |
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el caballo, que no cupo, atado a la reja queda, |
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como mula de dotor que siempre queda a la puerta. |
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Se ha ido para la cocina, por ver quién estaba en ella: |
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el gatito y la gatita lamiéndose la cazuela; |
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de un puntapié que les dio los echó las tripas fuera. |
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Se ha ido para la sala por ver quién estaba en ella. |
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Ha visto una bujía luciendo sobre una mesa. |
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--¿Qué muertos hay en mi casa que los alumbran con cera?.-- |
34 |
Se ha ido para la alcoba, por ver quién estaba en ella: |
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el galán y la galana, durmiendo y a pierna suelta. |
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Le dio siete puñaladas, que de la menor muriera. |
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Despierta la condenada, que en su sangre se revuelca. |
38 |
--Dispierta, falsa traidora, falsa traidora, dispierta, |
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¿qué te faltaba en mi casa pa haberme hecho tal ofensa?. |
40 |
Si te faltaba dinero, haber vendido una prenda; |
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si te faltaba criada, haber metido una negra; |
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si te faltaba marido, haberme escrito dos letras, |
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que bien sabes escribir, ¡ojalá Dios, no supieras! |
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Coge esa niña en tus brazos, dala la leche postrera; |
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coge esa bula en tus manos y confiésate con ella, |
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que no hay confesor más cerca ni te doy lugar siquiera.-- |
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Al decir "Jesús, pequé" el corazón la atraviesa. |
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Ha calao siete colchones, sábanas y delanteras, |
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y de humadas que no cuento, que pasan de media `ocena. |
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Coge la niña en sus brazos, se va para en ca la suegra. |
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--Toma esa niña en tus brazos que tu hija muerta queda. |
52 |
--¿Cómo podía ser eso, si anoche cené con ella?. |
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--Coja esa niña en sus brazos, no haga otro tanto con ella, |
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a otra vez que críes hijas, críalas con más vergüenza.-- |
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Se marchó para la plaza tirando va la montera. |
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--Venir, venir, carniceros, en mi casa carne queda: |
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un novillito de quince y una novilla pequeña. |
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Si toos hicieran lo mismo se acababan las cornamentas.-- |
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0818:2 Presagios del labrador (é-a) (ficha no.: 1808)
[0084 El cordón del diablo and 0132 La rueda de la fortuna, contam.]
Versión de Soutelo (parr. Piquín, ay. Ribeira de Piquín, ant. Meira, p.j. Fonsagrada, Lugo, España).
Recitada por María Antonia Álvarez (46a). Recogida por Aníbal Otero Álvarez, 00/00/1929 (fecha deducida) (Archivo: AMP; Colec.: Otero, A. (M. Goyri-R. Menéndez Pidal)). Publicada en RT-Galicia 1998, pp. 379-380. 078 hemist. Música registrada. |
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La rueda de la Fortuna, válgame Dios lo que rueda, |
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con media vuelta que ha dado me ha traido a esta tierra; |
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y he visto la mejor dama que Dios en el cielo espera, |
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de codos a una ventana, muy adornada y compuesta. |
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Le he dicho: --Señora mía como si la conociera, |
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se hiciera el favor de darme un clavel de su maceta.-- |
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Quitó de su mano un guante, del bolsillo una tijera, |
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cortó un clavel y besólo, por el balcón se lo diera. |
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--Tome usted, caballero, estime muy bien la prenda, |
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que aquel que le dio el clavel también la sangre le diera; |
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pero temo a mi marido que es hombre de gran soberbia.-- |
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Su marido va en el campo para guardar su hacienda, |
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que le costó su dinero, no es de razón que la pierda. |
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Por un pájaro que oyó, parte a su marido diera: |
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--Deja el caballo que corre, coge el caballo que vuela.-- |
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Y a los dos pasos que dio, dejó de correr y vuela. |
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Y al llegarse a la puerta, una seña mala viera: |
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halló la puerta cerrada debiendo de estar abierta. |
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Con un puñal que llevaba un gujero hizo en la puerta. |
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--Por donde caben mis pies también cabe mi cabeza, |
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también cabe mi caballo si le tiran de las riendas. |
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Luz encendida en mi casa, deber es que muerte espera; |
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y un galán está en mi cama, ronca y duerme a pierna suelta.-- |
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Le dio siete puñaladas, de la menor se muriera; |
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la sangre que de él cayó un gujero hizo en la tierra. |
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--Levanta el niño, traidora, dale la leche postrera. |
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¿Qué te faltaba en mi casa? dímelo, ¿qué falta era? |
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Si te faltaba un buen pan, bajáraste a la panera; |
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si te faltaba dinero, tiraras de la naveta; |
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si tenías falta de hombre, mandárasme una esquela. |
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Di la confesión, traidora, que `o te ayudaré a ella.-- |
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Y al decir "Señor, pequé", el corazón le partiera. |
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Cogiera el niño en los brazos y el sombrero en la cabeza; |
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cerró puertas y ventanas y a la calle se saliera. |
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Calle arriba y calle abajo, diciendo de esta manera: |
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--El que quiera carne fresca, vaya a mi casa por ella, |
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que lle hay un becerro muerto, también la linda becerra; |
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a cuatro cuartos la libra y a seis es la libra y media, |
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y el que no tenga dinero tampoco se irá sin ela. |
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0818:3 Presagios del labrador (é-a) (ficha no.: 1958)
Versión de El Payo (ay. El Payo, p.j. Ciudad Rodrigo, Salamanca, España).
Recogida por Ramón Menéndez Pidal, 00/00/1910 (Archivo: AMP; Colec.: María Goyri-Ramón Menéndez Pidal). Publicada en IGR-vulgar 1999, pp. 103-104 (tipo A). 074 hemist. Música registrada. |
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Estaba un hombre en el campo recogiendo sus haciendas, |
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el corazón le decía: --Vete a tu casa y no duermas, |
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que tienes la mujer moza, no te haga alguna ofensa.-- |
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--Mientes, mientes, corazón, que mi mujer es muy buena; |
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siete años hay que la tengo, no la he visto tal ofensa.-- |
6 |
Monta en su caballo blanco, por delante la escopeta, |
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va dejando anchos caminos, cogiendo angostas veredas; |
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cogiera un veredita que a su casa iba derecha. |
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A la entrada del lugar la su casa la primera, |
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dio tres vueltas al palacio no ha encontrado puerta abierta, |
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con el puñal que llevaba le hizo un buraco a la puerta. |
12 |
Lo primero que metió fue el cañón de la escopeta, |
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lo segundo son los pies, lo tercero la cabeza; |
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el caballo, que no cupo, lo dejó atado a la reja; |
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le ha echado paja y cebada para que ruido no meta. |
16 |
Ahora vamos a la lumbre, por ver quién estaba en ella. |
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Lo primero que encontró fueron zapatos y medias. |
18 |
--Este zapato no es mío, esta media no es de ella, |
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que este zapatito blanco no se estila aquí en mi tierra.-- |
20 |
Ahora vamos a la cama, por ver quién estaba en ella: |
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estaba el galán y la dama, dormiendo a la pierna suelta. |
22 |
Agarró al galan por la mano, tres puñaladas le diera. |
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Ahora vamos a la dama, que el galán seguro queda: |
24 |
--Ven acá, perra villana, ven acá villana perra. |
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Si lo hacías por comer, ahí tenías mis haciendas; |
26 |
si lo hacías por beber, ahí tenías mis bodegas; |
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si lo hacías por marido, haberme escrito unas letras, |
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diciendo que estabas mala aunque nunca lo estuvieras. |
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Dale la leche a ese niño, dale la leche postrera. |
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--Los demonios me llevaran si yo la leche le diera. |
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--Di la confesión, María, dila, que mueres sin ella.-- |
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Al decir "su único hijo" el corazón le atraviesa. |
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La ató a la cola `el caballo, a la plaza se la lleva. |
34 |
Tiró el sombrero por alto: --¿Quién me compra carne fresca?, |
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que matara un jabalí, una valiente ternera. |
36 |
A cuarto vendo la libra y a ochavo la libra y media; |
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el que no traiga dinero tampoco se irá sin ella.-- |
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0818:1 Presagios del labrador (é-a) (ficha no.: 122)
Versión de Riaza (ay. Riaza, p.j. Sepúlveda, ant. Riaza, Segovia, España).
Recitada por Benigna [de Frías]. Recogida por Ramón Menéndez Pidal, 00/09/1905 (Archivo: AMP; Colec.: María Goyri-Ramón Menéndez Pidal). Publicada en TRC-Segovia 1993, pp. 327-328. 070 hemist. Música registrada. |
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Estando el triste en el campo gobernando de su hacienda, |
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el corazón le decía: --Vete a tu casa y no duermas, |
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que tienes una mujer que te hace dos mil ofensas.-- |
4 |
Deja el caballo que corre, coge la yegua que vuela; |
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deja los anchos caminos, coge las angostas sendas. |
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Al entrar en la ciudad, su casa era la primera, |
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y la ha encontrado cerrada la que siempre estaba abierta. |
8 |
Con un puñal que llevaba hace un agujero y entra; |
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primero metió los pies, por libertar la cabeza, |
10 |
la yegua, que no cupó, la dejó atada a la verja, |
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como yegua de doctor que siempre estaba a la puerta. |
12 |
Coge una luz en sus manos y a su casa la ha dao vuelta, |
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miró salas y rincones, no ha encontrado nada en ella. |
14 |
Ahora vamos a la arcoba donde la dama durmiera: |
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la ha encontrao con un galán durmiendo a la pierna suerta. |
16 |
La ha dao siete puñaladas, que de la menor muriera. |
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Ahora vamos a la dama, que el galán ya muerto queda. |
18 |
La dice: --¡Perra malvada!-- La dice: --Malvada perra, |
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¿qué te faltaba en mi casa, que me haces tan gran ofensa? |
20 |
Ni te faltaba que comer, ni que sacar a la mesa, |
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ni te faltaba zapato, tampoco la buena media, |
22 |
si te faltaba el marido, haberme escrito dos letras |
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diciendo que estabas mala, aunque nunca lo estuvieras. |
24 |
Coge ese niño en tus brazos, dale la leche postrera |
|
y dime la confesión, que yo te ayudaré en ella.-- |
26 |
Al decir "Jesús, pequé" de puñaladas la diera. |
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Se ha echado la calle abajo como haciendo un poco `e pierna. |
28 |
--El que quiera comprar carne vaya a mi casa por ella, |
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el que quiera macho, macho; el que quiera hembra, hembra; |
30 |
un novillo de treinta años y una vaca de cuarenta, |
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a tres y media va el macho y a cuatro reales la hembra.-- |
32 |
Coge su niño en sus brazos y a la suegra se lo lleva: |
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--Tenga usté, abuela, su nieto, que su madre muerta queda. |
34 |
--¡Malditos sean tales hombres que no sufren la primera! |
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--Si todos fue`án como yo, pocos cornudos hubiera. |
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Variantes: 18 añadido por otra informante; 26b diciendo de esta manera otra informante; 28 añadido por otra informante; 30a tengo un macho de la recitadora (corregido por otra informante); 32b y a la abuela la recitadora (corregido por otra informante). |
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0818:5 Presagios del labrador (é-a) (ficha no.: 2721)
[0311 La caza de Celinos, contam.]
Versión de Portugal s. l. (Portugal).
Recogida por José Leite de Vasconcellos, (Colec.: Leite de Vasconcellos). Publicada en Leite de Vasconcellos 1958-1960, RP, 1000, vv. 27-31. Reeditada en Costa Fontes 1997b, Índice Temático (© HSA: HSMS), p. 186, M12. 010 hemist. Música registrada. |
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Quem quijer baca e carnero beng`à mi cassa por eilha; |
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a quarto bendo la libra e a marabedí la média, |
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e quem nu` tuber dinero também num se bai sem eilha. |
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Fora, corno, fora corno, fora de mi cabeça; |
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se todos assi fazerem nunca cornos habera. |
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Nota del editor: Trata-se de uma contaminação com B9. Celinos [La caza de Celinos 0311]. Título original: O PRESSENTIMENTO DO LAVRADOR (É-A) (=SGA M5)
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