0318:1 Riberas de Duero arriba (á-o) (ficha no.: 1427)
Versión de España. Recogida 00/00/1550 Publicada en Silva de 1550, t. II, f. 54 (Romance de Diego Ordóñez*) y Pliego suelto del s. XVI. Aqui comienzan dos romances. El primero que dice: Riberas del Duero arriba en el Romancero del señor Durán [Madrid, IV, pl.169, 357-58; Dicc. 663]**. Reeditada en Wolf 1856b, Primavera y Flor de Romances, nº 41, vol. I, pp. 124-127 (Del Cid.--XVI.). 080 hemist. Música registrada. |
Riberas de Duero arriba cabalgan dos zamoranos | |
2 | en caballos alazanes ricamente enjaezados. |
Fuertes armas traen secretas y encima sus ricos mantos | |
4 | con sendas lanzas y adargas como hombres enemistados. |
A grandes voces oímos estándonos desarmando, | |
6 | si habria dos para dos caballeros zamoranos, |
que quisiesen tomar lid con otros dos castellanos; | |
8 | y los que las voces daban padre y hijo son entrambos. |
padre y hijo eran los hombres, padre y hijo los caballos. | |
10 | Dicen que es don Diego Ordóñez y su hijo don Hernando, |
aquel que reptó a Zamora por muerte del rey don Sancho, | |
12 | cuando el traidor de Vellido le mató con un venablo. |
Y aun al pasar de la puente padre y hijo van hablando: | |
14 | --No sé si oisteis, hijo, las damas que están mirando. |
--Bien las oí yo, señor, lo que quedan razonando, | |
16 | que las ancianas decían: "¡Oh qué viejo tan honrado!" |
y las doncellas decían: "¡Oh qué mozo tan lozano!"-- | |
18 | Palabras de gran soberbia son las que ellos van hablando, |
que si caso se ofreciese, y hubiese ruido en campo, | |
20 | que se matarían con tres y se matarían con cuatro, |
y si cinco les saliesen, que no los huirían el campo; | |
22 | con tal que no fuesen primos ni menos fuesen hermanos, |
ni de las tiendas del Cid ni de sus paniaguados, | |
24 | de la casa de los Arias salgan seis más esforzados.-- |
No falta quien los ha oído lo que ellos van razonando. | |
26 | Oídolo ha Gonzalo Arias. hijo de Arias Gonzalo. |
Siete caballeros vienen, todos siete bien armados, | |
28 | cubiertos de sus escudos, las lanzas van blandeando, |
y traen por apellido a San Jorge y Santiago. | |
30 | --¡Mueran, mueran los traidores, mueran y dejen el campo!-- |
A recebírselos sale don Ordoño y don Hernando: | |
32 | a los primeros encuentros don Ordoño mató cuatro, |
don Hernando mató dos y el otro les huyó el campo. | |
34 | Por aquel que se les iba las barbas se están mesando; |
preguntara el padre al hijo: --Di, hijo, ¿si estás llagado? | |
36 | --Eso os pregunto, señor, que yo no estoy sino sano. |
--Siempre lo tuvistes, hijo, mozo y flojo en el caballo; | |
38 | cuando habéis de cabalgar cabalgáis trasero y largo. |
Yo viejo, de los sesenta, a mis pies he muerto cuatro, | |
40 | vos, mozo de veinte y cinco, matáis dos vascos un gato.-- |
Variantes del Pliego Suelto: -11b por la muerte de don Sancho; -13a aun falta; -13b el padre al hijo ha hablado; -14a oiste; -14b a las damas que han hablado; -15a Muy bien las oí; -15b que estaban; -18b entre sí van razonando; -19b habiendo; -20b y lo mismo harían; -21a y si les saliesen cinco; -25a faltó; -25b de los que andan por los campos; -26a Oídolos; -30b m. o; -31a Al encuentro les salieron; -34b se van; -35b Decí, hijo, ¿estáis llagado?; -36b que no estoy yo; -37b ser muy flojo; -39a de años; -39b estaban cuatro; -40a y vos, de los veinte y cinco. Notas: *Con este romance comienzan los del cerco de Zamora. **Este romance tiene, como ha observado el señor Durán, «una casi identidad en la letra de varios fragmentos» con los dos que lo siguen, «á la par que una completa diferencia y cambio del asunto.» Y en efecto en el tercero romance los versos que dicen: Los dos contrarios guerreros, etc. parece, que aludan al asunto de éste, y que el componedor de éste haya confundido al caballero zamorano don Diego Ordóñez con el más célebre castellano del mismo apellido, así que aquí al principio son zamoranos los dos que retan a los castellanos, conforme a la tradición original de este romance, y al fin aparecen enemigos de Zamora y de Arias Gonzalo, como lo fue según la tradición común el castellano don Diego Ordóñez. |
0318:2 Riberas de Duero arriba (á-o) (ficha no.: 1428)
Versión de España. Recogida 00/00/1600 Publicada en un pliego suelto del s. XVI. Romance que dice: Riberas de Duero arriba caualgan dos çamoranos, con su glosa, hecha por Francisco de Argullo, etc. [Praga, II, pl. 73, 257-262; Dicc. 31]*. Reeditada en Wolf 1856b, Primavera y Flor de Romances, nº 42, vol. I, pp. 127-129 (Del Cid.--XVII. Reto de los dos caballeros zamoranos). 058 hemist. Música registrada. |
Riberas de Duero arriba cabalgan dos zamoranos: | |
2 | las armas llevan blancas, caballos rucios rodados, |
con sus espadas ceñidas, y sus puñales dorados, | |
4 | sus adargas a los pechos, y sus lanzas en las manos, |
ricas capas aguaderas por ir más disimulados, | |
6 | y por un repecho arriba arremeten los caballos: |
que, según dicen, las gentes, Padre e hijo son entramhos. (sic) | |
8 | Palabras de gran soberbia entre los dos van hablando: |
que se matarán con tres, lo mesmo harán con cuatro, | |
10 | y si cinco les saliesen que no les huirian el campo, |
con tal que no fuesen primos, ni menos fuesen hermanos, | |
12 | ni de la casa del Cid, ni de sus paniaguados, |
ni de las tiendas del rey, ni de sus leales vasallos: | |
14 | de todos los otros que haya salgan los más esforzados. |
Tres condes lo han oido, todos tres eran cuñados. | |
16 | --Atendédnos, caballeros, que nos estamos armando.-- |
Mientra los condes se arman el padre al hijo ha hablado: | |
18 | --Tú bien, vees hijo, mío, aquellos tablados altos |
donde dueñas y doncellas nos están de allí mirando, | |
20 | si lo haces como bueno serás de ellas muy honrado; |
si lo haces como malo serás de ellas ultrajado; | |
22 | más vale morir con honra que no vivir deshonrado, |
que el morir es una cosa que a cualquier nacido es dado.-- | |
24 | Estas palabras diciendo los condes han allegado. |
A los encuentros primeros el viejo uno ha derrocado; | |
26 | vuelve la cabeza el viejo, vido al hijo mal tratado, |
arremete para allá, y otro conde ha derribado; | |
28 | el otro desque esto vido vuelve riendas al caballo; |
los dos iban en su alcance: en Zamora lo han cerrado. |
Nota: *Durán ha publicado de este romance tan solo un fragmento sacado de una glosa en disparates que de él se hizo (Glosa de los romances ¡Oh Belerma, etc. Pliego suelto). Este fragmento dice así: Riberas del Duero arriba / cabalgan dos zamoranos // que, según dicen las gentes, / padre y hijo son entrambas. // Palabras muy soberbiosas / entre si las van hablando, // que con tres se matarían, / y aun harían así con cuatro; // que si cinco les viniesen, / no les negarían el campo, // con tal que no fuesen primos, / ni menos fuesen hermanos, // ni de las tiendas del Cid, / ni de sus paniaguados: // mas de las tiendas del rey / salgan los más esforzados // que a todos bueno farían / lo que dejan asentado. |
0318:3 Riberas de Duero arriba (á-o) (ficha no.: 1429)
Versión de España. Recogida 00/00/1605 Publicada en Escobar, Romancero del Cid y Timoneda, Rosa española. Reeditada en Wolf 1856b, Primavera y Flor de Romances, nº 42a, vol. I, pp. 129-133 (Del Cid.--XVIII.). 108 hemist. Música registrada. |
Riberas del Duero arriba cabalgan dos zamoranos: | |
2 | las divisas llevan verdes, los caballos alazanos, |
ricas espadas ceñidas, sus cuerpos muy bien armados, | |
4 | adargas ante sus pechos gruesas lanzas en sus manos, |
espuelas llevan ginetas y los frenos plateados. | |
6 | Como son tan bien dispuestos parecen muy bien armados, |
y por un repecho arriba salen más recios que galgos, | |
8 | y súbenlos a mirar del real del rey don Sancho. |
Desque a otra parte fueron dieron vuelta a los caballos, | |
10 | y al cabo de una gran pieza soberbios ansí han fablado: |
--¿Tendrédes dos para dos, caballeros castellanos, | |
12 | que puedan armas facer con otros dos zamoranos, |
para daros a entender no face el rey como hidalgo | |
14 | en quitar a doña Urraca lo que su padre lo ha dado? |
Non queremos ser tenidos, ni queremos ser honrados, | |
16 | ni rey de nos faga cuenta, ni conde nos ponga al lado, |
si a los primeros encuentros no los hemos derribado; | |
18 | y siquiera salgan tres, y siquiera salgan cuatro, |
y siquiera salgan cinco, salga siquiera el diablo, | |
20 | con tal que no salga el Cid, ni ese noble rey don Sancho, |
que lo habemos por señor, y el Cid nos ha por hermanos: | |
22 | de los otros caballeros salgan los más esforzados.-- |
Oídolo habían dos condes los cuales eran cuñados: | |
24 | --Atended, los caballeros, mientras estamos armados.-- |
Piden apriesa las armas, suben en buenos caballos, | |
26 | caminan para las tiendas donde yace el rey don Sancho; |
piden que les dé licencia que ellos puedan hacer campo | |
28 | contra aquellos caballeros, que con soberbia han hablado. |
Allí fablara el buen Cid, que es de los buenos dechado: | |
30 | --Los dos contrarios guerreros non los tengo yo por malos, |
porque en muchas lides de armas su valor habían mostrado, | |
32 | que en el cerco de Zamora tuvieron con siete campo: |
el mozo mató a los dos, el viejo mató a los cuatro; | |
34 | por uno que se les fuera las barbas se van pelando.-- |
Enojados van los condes de lo que el Cid ha fablado; | |
36 | el rey cuando ir los viera que vuelvan está mandando. |
Otorgó cuanto pedían, más por fuerza que de grado. | |
38 | Mientras los condes se arman, el padre al hijo está hablando: |
--Volved, hijo, hacia Zamora, a Zamora y sus andamios; | |
40 | mirad dueñas y doncellas, cómo nos están mirando. |
Hijo, no miran a mí porque ya soy viejo y cano; | |
42 | mas miran a vos, mi hijo, que sois mozo y esforzado. |
Si vos facéis como bueno seréis de ellas muy honrado; | |
44 | si lo facéis de cobarde, abatido y ultrajado. |
Afirmaos en los estribos, terciad la lanza en las manos, | |
46 | esa adarga ante los pechos y apercebid el caballo, |
que al que primero acomete tienen por más esforzado.-- | |
48 | Apenas esto hubo dicho, ya los condes han llegado; |
el uno viene de negro y el otro de colorado; | |
50 | vanse unos para otros, fuertes encuentros se han dado, |
mas él que al mozo le cupo derribólo del caballo, | |
52 | y el viejo al otro de encuentro pasóle de claro en claro. |
El conde, de que esto viera, huyendo sale del campo | |
54 | y los dos van a Zamora con vitoria muy honrados. |
Variantes de la Rosa española de Timoneda: -7b suben; -8a sálenselos; -10b soberbiamente; -11b Si habla dos para dos; -12a que quisiesen facer armas; -13a por darlos a conocer.; -14b cuanto; -23a tres; -23b esos tres condes; -24b armando; -26b posa; -31a muchos campos.; -31b bon; -32b ficieron; -35b mesando; -36a desque; -36b llamando; -49b y el otro viene de blanco, // y el otro viene de verde, / dicen que es enamorado: //; -51a con el; -53a Y el otro; -54a ya los vuelven. |