Pan-Hispanic Ballad Project

Total: 9


0445:7 El soldado y la monja (á-a)            (ficha no.: 8238)

Versión de Serandinas (ay. Boal, p.j. Luarca, ant. Castropol, Asturias, España).   Recogida 00/00/1889 (Archivo: AMP). Publicada en Romancero asturiano, tomo II (en prensa) y Petersen-Web 2006, Texto.  056 hemist.  Música registrada.

     Nesa villa de Madrid,    junto a la calle empedrada,
  2   habitaba un regimiento    de soldados [de la armada].
     Entre ellos había uno    que a todos sobrellevaba;
  4   llevaba gibón de seda,    la camisola de holanda.
     Un domino yendo a misa    al convento a Santa Clara,
  6   por una reja menuda    linda monja le miraba.
     --Sácame de aquí, soldado,    soldadito de la armada,
  8   que si de aquí no me sacas    no llego a por la mañana.--
     El soldado, que la oyó,    volviendo la vista atrás,
  10   cogiérala de la mano    llevándola a la posada,
     mandando hacer buena cena,    buena cena y mejor cama;
  12   mandó echar siete colchones,    siete sábanas de holanda,
     de riba de aquello todo    una colcha colorada,
  14   y de cabecera puso    un cuero de Ribadavia.
     Cuando se esnuda la monja    ¡Virgen, suspiros que daba!
  16   --¿Por qué suspira la monja,    la monjita de mi alma?
     --Porque hoy me acuesto con hombres    estando con Cristo esposada.--
  18   Vuelve a vestir esa ropa    y él que también le ayudaba.
     --Dama de tan buen señor    para mí no está guardada.--
  20   Y cogiéndola de la mano    al convento la llevara.
     Al subir las escaleras    co`l buen Jesús encontrara,
  22   fincó la rodilla en tierra,    los pies al Señor besara.
     --Perdóname, Jesús mío,    Jesús mío de mi alma,
  24   yo la culpa no la tuve,    la monja fue la culpada;
     aunque culpa no la tuve,    yo para mí la tomara.--
  26   Bajó Cristo la cabeza,    dijo que le perdonaba,
     --Y también perdono a la monja,    que no me ha agraviado en nada.
  28   Irá a la gloria el soldadito    cuando de este mundo vaya.--
     ¡Esa señora me valga,    la bendita Soberana!

Nota: Original ms. de letra de mano desconocida, facilitado por Bernardo Acevedo, fechado en 1889 (Col. "Serandinas" A, pp. 4-7).

Go Back
0445:8 El soldado y la monja (á-a)            (ficha no.: 8239)

Versión de Figueiredo (ay. Boal, p.j. Luarca, ant. Castropol, Asturias, España).   Recogida hacia 00/00/1885 (Archivo: AMP). Publicada en Romancero asturiano, tomo II (en prensa) y Petersen-Web 2006, Texto.  037 hemist.  Música registrada.

     Nesa villa de Madrid,    junto a los Caños del agua,
  2   habitaba un caballero,    soldadito de la armada.
     . . . . . . . . . . . . . . . . . . .    . . . . . . . . . . . . . . . . . . .
     la chupa de fina felpa    . . . . . . . . . . . . . . . . . . .
  4   Un día yendo a la misa    al convento ` Santa Clara
     por una reja menuda    una monja le miraba
  6   y entre suspiros decía    . . . . . . . . . . . . . . . . . . .
     --Sácame de aquí, soldado,    soldadito de mi alma,
  8   si no me sacas de aquí    no llego a por la mañana.--
     El soldado, que esto oyera,    del convento la sacara.
  10   [. . . . . . . . . . . . . . . . . . .]    La llevara a su posada.
     Mandara hacer buena cena,    mandara hacer mejor cama.
  12   --Y por cabecera pongan    un cuero de Ribadavia.--
     El soldao se desvestía,    la monja se desnudaba.
  14   --Perdóname, Jesús mío,    Jesús mío de mi alma,
     porque me acuesto con hombre    estando con Jesús desposada.
  16   --Monjita, ponte esa ropa,    ponte esa ropa preciada,
     dama de tan gran valor    no está para mí guardada.--
  18   La agarrara de la mano    y al convento la llevara.
     Al bajar de la escalera    con Jesucristo encontrara
     . . . . . . . . . . . . . . . . . . .    . . . . . . . . . . . . . . . . . . .
  20   Cuando deste mundo fuera    tendría la gloria ganada.

Nota: Dictada o recogida por José García Méndez. Remitida por el colector, o por Bernardo Acevedo, c. 1885, y copiada por Juan Menéndez Pidal; copia ms. de letra de J. Menéndez Pidal.

Go Back
0445:2 El soldado y la monja (á-a)            (ficha no.: 2159)

Versión de Villamartín de Villadiego (ay. Humada, ant. Villamartín de Villadiego, p.j. Burgos, ant. Villadiego, Burgos, España).   Recitada por Felisa. Recogida por Manuel Manrique de Lara, 00/00/1918 (Archivo: AMP; Colec.: Manrique de Lara, M.). Publicada en IGR-vulgar 1999, pp. 375-376.  052 hemist.  Música registrada.

     Lo vivía un soldadito    en la ley de Dios humana,
  2   que tenía devoción    ir a misa a Santa Clara.
     No ha llegado a la menor,    él a la mayor aguarda,
  4   se arrecató para el coro,    vió una monjita asomada.
     --¡En mi vida he visto yo    monjita más adornada!
  6   --Tampoco yo un soldadito,    tampoco tan linda cara,
     que si me sacas de aquí    entre esta noche y mañana,
  8   [que si me sacas de aquí]    he de ser tu enamorada.--
     La agarró de las moñecas    y consigo la llevaba.
  10   Les pusieron rica cena,    rica cena, rica cama,
     las sábanas son de seda,    las almohadas son de holanda,
  12   la colcha lo era de amasco,    de la morisca labrada.
     Y después de haber cenado    juntos se van a la cama.
  14   El soldado se desnuda,    la monja suspensa estaba.
     --¿Cómo no te esnudas, monja,    monjita muy adornada?
  16   --Cómo me he de esnudar, triste,    si estoy con Cristo esposada.--
     El soldado, que no es bobo,    pegó un blinco de la cama,
  18   muy aprisa se vestía,    más aprisa se calzaba.
     La agarró de las moñecas    y consigo la llevaba.
  20   A la entrada del convento    las campanas se volteaban;
     todas las monjas decían:    --Aquí hay milagro u desgracia.--
  22   Se levantó la abadesa,    que era la que más mandaba;
     miraba`n todas las celdas,    miraba`n todas las camas.
  24   En la cama`e aquella monja    un Cristo enclavado estaba;
     en los brazos de aquel Cristo    dejó el soldadito el alma,
  26   también la dejó la monja,    monjita muy adornada.

Go Back
0445:5 El soldado y la monja (á-a)            (ficha no.: 3428)

Versión de Campo de Ebro (ay. Valderredible, p.j. Reinosa, Cantabria, España).   Recitada por Victor Gutiérrez (84a). Recogida por José Manuel Fraile Gil y Álvaro Fernández Buendía, 04/09/1988 (Archivo: ASFG; Colec.: Fraile Gil, J. M.). Publicada en Fraile Gil Rom-Panhisp.-1 1992/5CD, Primera Antología Sonora, v. 5, TECNOSAGA, KPD-(5)10.9004, corte 24 © Fraile Gil. Reproducida aquí con permiso del editor.  056 hemist.   Música registrada.

     Por los altos de Tudela    bajan las aguas muy claras,
  2   y bajan dos compañías    y un soldadito de guardia.
     Las plumas en el sombrero,    unas verdes y otras blancas,
  4   las blancas por su hermosura,    las verdes por su esperanza.
     Ese soldado fue a misa    un lunes a la mañana
  6   a ese monumento que dicen    a ese convento que llaman
     los frailes, de San Francisco,    las monjas, de Santa Clara.
  8   Ya se termina la misa,    la gente se caminaba
     y una monja desde el coro    con suspiritos clamaba:
  10   --Soldadito de mi vida,    soldadito de mi alma.--
     eso que oyó el buen soldado,    ha vuelto pa atrás la cara
  12   y ha visto que era una monja    como la nieve de blanca.
     --Si puedo servirla en algo,    podrá hablar con confianza.
  14   --Para las diez o las doce    te espero y no me hagas falta.--
     Ya dio las doce el reloj,    el soldado caminaba.
  16   Cuando el soldado llegó,    la monja ya se escolgaba.
     La ha recibido en sus brazos,    la ha llevado a la posada;
  18   mandó poner rica cena,    mandó poner rica cama
     y después de haber cenado    dice: --Vamos a la cama.--
  20   El soldao se desnudó,    la monja no`s desnudaba.
     --Desnúdate, fiel de mi vida,    desnúdate, fiel de mi alma.
  22   --No puedo dormir con hombres    que estoy con Cristo esposada.--
     Eso que oyó el buen soldado,    se ha tirado de la cama;
  24   muy de prisa se vestía,    más de prisa se calzaba.
     La agarró de las muñecas    y la lleva a donde estaba.
  26   --Sube por donde bajaste,    que ya está puesta la escala.--
     Y allá en medio del camino    un crucifijo encontraba.
  28   Era Dios, nuestro Señor,    que ya bajaba a buscarla.

Nota: -4b casi inaudible la última palabra.
Nota de Fraile Gil: Canto de velada invernal

Go Back
0445:6 El soldado y la monja (á-a)            (ficha no.: 5575)

Versión de Campo de Ebro (ay. Valderredible, p.j. Reinosa, Cantabria, España).   Recogida por José María de Cossío y Tomás Maza Solano, entre 1933-1934 publicada en Cossío 1933-1934, I. LXI (nº 261), pp. 466-468.  060 hemist.  Música registrada.

     En los altos de Tudela,    a par que las aguas claras,
  2   bajaban dos compañías    y un soldadito de guardia;
     las plumas en el sombrero,    unas verdes, otras blancas,
  4   las blancas por su hermosura,    las verdes por su esperanza.
     Este soldado fue a misa    un lunes por la mañana
  6   a ese convento que dicen,    a ese convento que llaman
     los frailes de San Francisco,    las monjas de Santa Clara.
  8   Ya se concluyó la misa,    la gente se caminaba
     y una monja desde el coro    con un suspiro exclamaba;
  10   --Soldadito de mi vida,    soldadito de mi alma.--
     Eso que oyó el buen soldado    ha vuelto hacia atrás la cara
  12   y ha visto que era una monja    como la nieve de blanca.
     --Si puedo servirla en algo    puede hablar con confianza.
  14   --Para las diez o las doce    te espero, no me hagas falta.--
     Ya dio las doce el reloj    y el soldado allí llegaba;
  16   cuando el soldado llegó    la monja ya se escolgaba;
     la ha recibido en sus brazos,    la ha llevado a la posada;
  18   mandó poner rica cena,    mandó poner rica cama,
     y después de haber cenado    la agarró su mano blanca,
  20   y la dice: --Prenda mía,    vamos, vamos ya a la cama.--
     El soldado se desnuda,    la monja no se esnudaba.
  22   --Desnúdate, bien de mi vida;    desnúdate, bien de mi alma.
     --No me desnudaré, no,    ni iré contigo a la cama,
  24   no puedo dormir con hombre,    que estoy con Cristo esposada.--
     Esto que oyó el buen soldado,    se ha tirado de la cama,
  26   muy aprisa se vestía,    más aprisa se calzaba.
     La cogió de las muñecas    y la llevó donde estaba.
  28   --Sube por donde bajaste    que ya está puesta la escala.--
     Y al subir por la escalera    un crucifijo encontrara;
  30   era Dios Nuestro Señor    que ya bajaba a buscarla.

Go Back
0445:1 El soldado y la monja (á-a)            (ficha no.: 1838)

Versión de Nullán (ay. As Nogáis, p.j. Lugo, ant. Becerreá, Lugo, España).   Recitada por Manuel Injerto (68a). Recogida por José Joaquim Dias Marques, Pere Ferré, Flor Salazar y Dolores Sanz, 14/07/1983 (Archivo: ASOR; Colec.: Encuesta GALICIA 83; cinta: 8.14-7.3-A7). Publicada en RT-Galicia 1998, pp. 407-408.  034 hemist.  Música registrada.

     Allá arriba, allá arriba,    junto al reino de Navarra,
  2   saliera un batallón    de regimiento de armada.
     El más chiquitito de ellos    sobre los otros mandaba;
  4   vestía chaqueta de oro    y pantalones de holanda.
     Por la reja de un convento    una monja le miraba:
  6   --Sácame de aquí, soldado,    soldadito de mi alma,
     que si de aquí no me sacan,    no llego viva a mañana.--
  8   La cogiera por la mano    y consigo la llevara.
     Mandara poner la cena    y mejor hacer la cama.
  10   Al estarse desnudando,    la monja ya suspiraba:
     --¿Por qué suspiras, mi vida,    por qué suspiras mi alma?
  12   --Me voy acostar c`un hombre,    estando con Cristo esposada.--
     La cogiera por la mano,    al convento la llevara.
  14   Al subir las escaleras,    con Jesucristo encontrara.
     --Señor mío Jesucristo,    perdona mi ignoranza;
  16   yo he tenido la culpa    y ella ha sido la causa.--
     Bajó Cristo la cabeza    diciendo que perdonaba.

Go Back
0445:9 El soldado y la monja (á-a)            (ficha no.: 8662)

Versión de Santoyo (ay. Santoyo, p.j. Palencia, ant. Astudillo, Palencia, España).   Recitada por Adela Martínez (23a). Recogida por Narciso Alonso Cortés, (Archivo: AMP; Colec.: Alonso Cortés, N.). Publicada en Alonso Cortés 1906, p. 94.  050 hemist.  Música registrada.

     Vivía un soldadito    en la ley de Dios humana;
  2   tenía de devoción    de oír misa en Santa Clara.
     No se aguarda a la mayor,    que a la menor se quedaba.
  4   Ha vuelto la cara atrás,    ha visto monjita humana.
     --No la he visto en mi vida    monjita tan adornada.
  6   --Tampoco yo, soldadito,    tampoco tu linda cara.
     Si me sacaras de aquí    entre esta noche y mañana,
  8   si me sacaras de aquí,    yo contigo me casara.--
     La ha cogido de la mano,    pa su casa la llevaba;
  10   la ha puesto una rica cena,    también una rica cama,
     los colchones son de seda,    los almohadones de holanda;
  12   y después de haber cenado    juntos se van a la cama.
     --¿Cómo no se desnuda mi monja,    monjita tan adornada?
  14   --¿Cómo tengo desnudarme,    si estoy con Cristo esposada?
     --Vámonos para el convento,    que abierta quedó la escala.--
  16   La ha cogido de la mano,    al convento la llevaba;
     al llegar al convento    las campanas se volteaban.
  18   Salieron todas hs monjas    a ver por lo que volteaban,
     tambián salió la abadesa,    como ella en todo mandaba.
  20   --¿Quién me ha robado mi monja,    mi monja quién la robaba?
     --No he sido yo el enamorado,    que ha sido ella la enamorada.--
  22   Registraron toas las celdas    y en seguida toas las cimas;
     en la cama aquella monja    un crucifijo encontrara,
  24   en las manos de aquel Cristo    las armas del soldado estaban,
     Aquí se acabó la historia    de la monjita adornada.

Título original: La monja adornada.

Go Back
0445:3 El soldado y la monja (á-a)            (ficha no.: 2160)

Versión de Alto Alentejo s. l. (dist. Portalegre, Alto Alentejo, Portugal).   Recogida por Coronel José Pedro Martins Barata, publicada en Martins Barata 1969, Ethnos, p. 121. Reeditada en IGR-vulgar 1999, pp. 376-377.  046 hemist.  Música registrada.

     Na cidade de Clamor    na maior que tinha a Espanha
  2   passeia um cavalheiro,    um cavalheiro de fama.
     Onde vai ele ouvir missa?    Ao convento de Santa Clara,
  4   pois o padre lha dizia    como era costumada,
     e a missa que lhe dizia    era uma missa rezada.
  6   Quando se acabou a missa    ele logo se levantou.
     Entre as portas do convento    uma freirinha o esperava.
  8   --Deus te salve, cavalheiro,    lindo rostro, formosa cara,
     desde que tu és vindo    minha vida é roubada,
  10   leva-me por tua esposa    ou por tua namorada,
     ou, quando não me levardes,    matai-me com esta espada.
  12   Eu vou falar a um anjo    que me vá fazer a guarda.--
     Das dez para as onze horas    cavalheiro que chegava.
  14   Agarrou-lhe pela mão    ao seu quartel a levava.
     De galinha e capões    grande ceia se arranjava.
  16   Quando se acabou a ceia    ele logo se levantava,
     agarrou-lhe pela mão    ao seu quarto a levava.
  18   --Eu não me deito com hombre,    com Jesus Cristo estou casada.--
     Agarrou-lhe pela mão,    ao seu convento a levava.
  20   --Aqui tendes a freirinha    pois eu não lhe devo nada,
     se lhe correr algum perigo    que de mim se não queixara.--
  22   ¡Ó ditoso soldado,    ó ditoso da sua alma,
     nos braços de Jesus Cristo,    que grandes alentos dava!

Go Back
0445:4 El soldado y la monja (á-a)            (ficha no.: 2768)

Versión de Alto Alentejo s. l. (dist. Portalegre, Alto Alentejo, Portugal).   Documentada en o antes de 1969. Publicada en Martins Barata 1969, p.121, apud IGR-vulgar 1999, 213b. Reeditada en Costa Fontes 1997b, Índice Temático (© HSA: HSMS), p. 237-238, S26.  046 hemist.  Música registrada.

     Na cidade de Clamor,    na maior que tinha a Espanha,
  2   passeia um cavalheiro,    um cavalheiro de fama.
     Onde vai ele ouvir missa?    Ao convento de Santa Clara,
  4   pois o padre lha dizia    como era costumada,
     e a missa que lhe dizia    era uma missa rezada.
  6   Quando se acabou a missa    ele logo se levantou.
     Entre as portas do convento    uma freirinha o esperava.
  8   --Deus te salve, cavalheiro,    lindo rostro, formosa cara;
     desde que tu és vindo,    minha vida é roubada.
  10   Leva-me por tua esposa    ou por tua namorada,
     ou, quando não me levardes,    matai-me com esta espada.--
  12   Eu vou falar a um anjo    que me vá fazer a guarda.
     Das dez para as onze horas    cavalheiro que chegava.
  14   Agarrou-lhe pela mão,    ao seu quartel a levava;
     de galinha e capões    grande ceia se arranjava.
  16   Quando se acabou a ceia    ele logo se levantava,
     agarrou-lhe pela mão,    ao seu quarto a levava.
  18   --Eu não me deito com hombre,    com Jesus Cristo estou casada.--
     Agarrou-lhe pela mão,    ao seu convento a levava.
  20   --Aqui tendes a freirinha,    pois eu não lhe devo nada;
     se lhe correr algum perigo,    que de mim se não queixara.--
  22   Oh ditoso do soldado,    oh ditoso da sua alma;
     nos braços de Jesus Cristo,    que grandes alentos dava!

Título original: O SOLDADO E A FREIRA (Á-A).

Go Back
Back to Query Form