Pan-Hispanic Ballad Project

Total: 6


0546:6 Don Alejo muerto por traición de su dama (í-a)            (ficha no.: 8371)

Versión de Sisterna (parr. Santa María de Sisterna, ay. Ibias, p.j. Cangas del Narcea, ant. Cangas de Tineo, Asturias, España).   Recitada por Belarmina Sal González (83a en 1991). Recogida por Anita Gavela, Juan José Pérez, y Jesús Suárez López, 02/08/1991 (Colec.: Suárez López, J.). Publicada en SilAstur VI 1997, nº 41:1, p. 328 (notación musical).  032 hemist.  Música registrada.

     --¿A dónde vas, Valdovinos,    dónde vas que no es de día?
  2   --Y que seya, que no seya    tengo de ir ver a María.--
     En el medio del camino    una mala seña vía,
  4   le dijera una voz:
     --Que no vayas, Valdovinos,
  6   que ella siete hermanos tiene    que te van quitar la vida.
     --Que me la quiten que no,    ¡tengo de ir ver a María!--
  8   A la salida de un valle    y al revolver n` una esquina
     vinieran los siete hermanos    que esperándole estarían.
  10   Del primer golpe que dio    matara los seis hermanos,
     y el más pequeñito d` ellos    que caso d` él no facía.
  12   En el trance de la muerte    d` esta manera decía:
     --¡Muera quien ronda de noche,    viva quien ronda de día!--
  14   Y le cortó la cabeza    para llevarla a María.
     --Aquí tienes, la mi hermana,    el que a ti te pretendía.
  16   --¿Por qué lo mataste, hermano,    que ése mal no te hacía?
     --¡Antes me mató a mí    seis hermanos qui `o tenía!--

Nota: La informante aprendió los romances de su madre, natural del mismo pueblo.

Go Back
0546:2 Don Alejo muerto por traición de su dama (í-a)            (ficha no.: 2011)

Versión de Peranzanes (ay. Peranzanes, p.j. Ponferrada, ant. Villafranca del Bierzo, comc. Fornela, León, España).   Recitada por Genoveva Fernández Lera (63a). Recogida por J. Antonio Cid, Bárbara Fernández, Margarita Pazmany y Ana Valenciano, 25/09/1979 (Archivo: ASOR; Colec.: Encuesta LEÓN 79; cinta: ``Peranzanes-Faro`` A4). Publicada en IGR-vulgar 1999, p. 181.  052 hemist.  Música registrada.

     --¿Dónde vas, querido Alexio,    dónde vas que no es de día?
  2   --Voy a cazar, la mi madre,    a los montes que solía.
     Écheme la bendición    por si acaso no volvía.
  4   --La de Dios vaya contigo,    la de la Virgen María.--
     Yendo por la calle abajo,    al revolver una esquina,
  6   yendo por la calle abajo,    muy malas señas había.
     --¿Es gente del otro mundo,    o gente del otro día?
  8   --No es gente del otro mundo,    ni gente del otro día,
     que soy un ángel del cielo    que a decírtelo venía,
  10   que esa mujer que tú tienes    para ti no convenía;
     nueve hermanos que ella tiene    te quieren quitar la vida.
  12   --Quítenla que no la quiten,    yo tengo a ver a María.--
     Yendo por la calle abajo    y al revolver a la esquina,
  14   ha visto a los nueve hermanos,    que esperándolo estarían.
     Diera las buenas noches,    nadie se las respondía.
  16   Echan mano a sus espadas,    yo también eché a la mía;
     la mía es de fino acero,    de siete cuartas medidas.
  18   Con el primer don de espada    a ocho en el suelo derriba.
     El más chiquitino de ellos,    que d` él caso no hacía,
  20   coge una piedra del suelo    y a don Alejo derriba.
     Le cortara la cabeza    y se la lleva a su amiga.
  22   --Toma, hermana, aquí tienes,    a quien tanto te quería.
     --¿Para qué mataste, hermano,    al que daño no te hacía?
  24   --Primero me mató a mí    ocho hermanos que tenía.
     ¡Viva quien ronda de noche,    muera quien ronda de día!
  26   Por causa de una mujer    nueve perdieron la vida.

Go Back
0546:5 Don Alejo muerto por traición de su dama (í-a)            (ficha no.: 3408)

Versión de San Martín de Agostedo (ay. Santa Colomba de Somoza, ant. Rodiezmo, p.j. Astorga, comc. Maragatería, León, España).   Recitada por Francisca Rebaque (74a). Recogida por José Manuel Fraile Gil, 31/05/1986 (Archivo: ASFG; Colec.: Fraile Gil, J. M.). Publicada en Fraile Gil Rom-Panhisp.-1 1992/5CD, Primera Antología Sonora, v. 5, TECNOSAGA, KPD-(5)10.9004, corte 5 © Fraile Gil. Reproducida aquí con permiso del editor.  032 hemist.   Música registrada.

     --¿Dónde vas, querido Alegio,    dónde vas que no es de día?
  2   --A caza voy, la mi madre,    a los montes que solía.--
     Echóle la bendición    por si acaso no volvía.
  4   --Seis hermanos de María    que andan por quitar la vida.
     --Me la quiten, me la dejen,    tengo que ver a María.--
  6   Un poquito más alante    al revolver de una esquina
     viera seis embozaditos    y a ninguno conociera.
  8   Les diera las buenas noches,    ninguno le respondiera.
     Desenvainaron las armas,    yo desenvainé la mía;
  10   del primer espadillazo    cinco cayeron en tierra.
     Quedó el más chiquito de ellos    que de él caso no hacía.
  12   Cogió una piedra del suelo    y a don Alegio derriba.
     Le cortara la cabeza,    se la lleva a María.
  14   --Toma, hermana, la cabeza    de aquél que te pretendía.
     --¿Para qué mataiste tú    a quien mal no te lo hacía?
  16   --Pa que él me mató a mí    cinco hermanos que tenía.--

Nota: Título en la Antología Sonora: Don Alejo muerto por los hermanos de su dama.
Notas de Fraile Gil: Se cantaba durante las veladas invernales. En una recitación anterior introdujo, tras el hemist. 9b, el siguiente verso: que la mía es ancha y larga, / de siete cuartas medida.

Go Back
0546:1 Don Alejo muerto por traición de su dama (í-a)            (ficha no.: 1712)

Versión de Penouta (ay. Viana do Bolo, ant. Viana, p.j. Pobra de Trives, ant. Viana do Bolo, Ourense, España).   Recitada por Benita Pérez. Recogida por Alfonso Hervella Courel, (Archivo: AMP). Publicada en RT-Galicia 1998, pp. 280-281.  055 hemist.  Música registrada.

     ¡Válgame Santa Ana, valga,    Virgen sagrada María!
     Un caballero en la cuadra,    don Alejos` dicía,
  2   ese tal se enamoró    d`una que llaman María;
     le sacó tres condiciones,    ninguna mujer haría:
  4   --La primera, ven a solas,    a solas sin compañía,
     la segunda, ven armado    para defender tu vida,
  6   la tercera, a medianoche    mientras mis padres dormían.--
     Alá por la medianoche,    don Alejos que camina.
  8   Su madre le está mirando    de la torre de Altamira.
     --¿Pr` ónde vas, ¡ay don Alejos!,    pr` ónde vas, que no es de día?
  10   --Écheme la bendición,    por si acaso no volvía.
     --Ahí te va mi bendición    y a de la Virgen María.--
  12   Ind` un poco más alante
     vira vir un penitente,    luz encranada traguía.
  14   --Dirásmelo, penitente,    dirásmelo por tu vida.
     --Soy el Redentor del mundo    qu` aquí a decirte venía,
  16   que sete hermanos que tiene    te están pra quitar la vida.
     --Que m` a quiten, que m` a dejen,    yo de rondarla tenía.--
  18   Y a la entrada d` una calle,    y a la vuelta d` una esquina
     vira estar sete embozados    y a ninguno conecía.
  20   Echan pedradas a tierra    que el cielo s` atemoriza.
     --Matar un hombre a pedradas    no es usar de valentía;
  22   desenvainen las espadas,    yo desenvaino la mía.--
     A los dos golpes primeros    los seis en tierra caían;
  24   se quedó el más chiquitillo    que d` aquel caso no hacía.
     Echó una pedrada a tierra    y a don Alejos derriba.
  26   Con las ansias de la muerte    ya don Alejos decía:
     --¡Oh, malhaya la mujer    que parió hijas bonitas!
  28   Por causa d` una mujer    sete perdemos la vida.

Go Back
0546:4 Don Alejo muerto por traición de su dama (í-a+estróf.)            (ficha no.: 2849)
[0101 No me entierren en sagrado, contam.]

Versión de Açores s. l. (Açores, reg. Açores, Portugal).   Recogida por Theóphilo Braga, (Colec.: Braga, T.). Publicada en Braga 1982, Cantos, 23. Reeditada en Costa Fontes 1997b, Índice Temático (© HSA: HSMS), p. 313, V2.  054 hemist.  Música registrada.

     Na cidade de Hungria    passeava um cavaleiro;
  2   cavaleiro, gente nobre,    é chamado Dom Aleixo.
     O chamado Dom Aleixo,    uma noite que saía,
  4   vira estar um ermitão,    oh bem alto, em demasia.
     --Se tu és carne humana,    vai na minha companhia;
  6   se tu és alma que pena,    eu te esconjuraria.
     --Eu não sou carne humana    que te vá em companhia,
  8   também não sou alma em pena    que tu me esconjurarias.
     Sou a morte, Dom Aleixo,    que te venho avisar:
  10   na corte estão sete homens    para a vida te tirar.
     --Antes que sejam outros sete,    Dom Aleixo não temia.
  12   E juro por minha espada,    por a Sagrada Maria:
     vou cumprir uma promessa    que fiz a Dona Maria.--
  14   Palavras não eram dadas,    as espadas retiniam.
     Quatro já estavam mortos    e três já eram feridos.
  16   O mais pequenino deles    uma pedra lhe atiraria.
     --Magano, não jogues pedras,    que é guerra de covardia;
  18   jogai a vossa espada,    que é guerra de valentia.
     Se essa vossa vos não vale,    vos emprestaria a minha.
  20   --Aos gritos de Dom Aleixo    acordai, Dona Maria!
     Vós me mataste, senhora,    vossos irmãos não podiam.
  22   Dêem-me tinta e papel,    oh, minha escrivanaria;
     quero deixar os meus bens    todos a Dona Maria.
  24   Que não morra por amores,    que foi porque m` eu perdi.
     Mal de amores não tem cura,    que é um mal desesperado;
  26   quem morre de mal de amores,    não se enterra em sagrado.
     Enterra-se em campo verde    onde vai pastar o gado.--

Nota del editor: Os últimos três versos pertencem a Não me Enterrem em Sagrado (K5) [No me entierren en sagrado 0101].
Título original: D. ALEIXO (Í-A + ESTRÓF.)

Go Back
0546:3 Don Alejo muerto por traición de su dama (í-a)            (ficha no.: 2012)

Versión de Algarve s. l. (dist. Faro, Algarve, reg. Algarve, Portugal).   Recogida por Theóphilo Braga, (Colec.: Braga, T.). Publicada en RGP III 1909, pp. 168-171. Reeditada en IGR-vulgar 1999, p. 181-182.  098 hemist.  Música registrada.

     Lá na côrte de Castella    entre los grandes vivia
  2   nobre e altivo cavalleiro,    que era a flor da fidalguia.
     Dom Aleixo lhe chamavam,    dom Aleixo se dizia;
  4   secretario era d`el-rei,    e el-rei mui bem lhe queria.
     De amores elle tratava    com dama d` alta valia;
  6   de dia andava-lhe a porta    e de noite a perseguia.
     --Sete annos tenho de amores,    sete annos e mais um dia;
  8   vae ser cumprida a palavra,    jurou que não faltaria,
     que esta noite á media noite    aos meus braços se daria.
  10   --Tres cousas te peço, Aleixo,    que a tu` honra pretendia,
     a uma que venhas só,    que não tomes companhia;
  12   a` outra que tragas armas    como é uso e cortezia,
     e que o teu pagem não saiba    o que saber não devia.--
  14   Dom Aleixo que tal ouve,    muito altivo ficaria;
     inda o sol ia correndo,    elle já se deitaria.
  16   Meia noie quasi a pino,    da cama logo se erguia;
     vestira sáia de malha,    seu capacete lumbria;
  18   na mão espada levava,    no cinto adaga escondia.
     Ao sair encontra o pagem    que os passos lhe já seguia.
  20   --Eu só me vou esta noite,    eu só, sem mais galhardia;
     de volta serei convosco    antes que amanheça o dia.--
  22   Rua abaixo caminhava,    rua acima se volvia,
     vira vir um penitente    que mui de perto o vigia.
  24   --Diz`-me se és alma que pena    pelas ruas d` agonia,
     que se vens buscar confôrto,    salvação te já daria.
  26   --Penando de ha muito estava    porque ainda te não via.
     Eu sou teu anjo da guarda,    o anjo da tua guia,
  28   que venho aque avisar-te    que te esperam á porfia
     sete espadas de emboscada    contra a tua bizarria.
  30   --Outras tantas que ellas fôssem,    atraza eu não voltaria;
     com um só palmo de ferro    minha vida guardaria.--
  32   Desapparece o phantasma,    que um anjo bem parecia.
     Volta abaxo o cavalleiro    e acima logo volvia;
  34   n` isto as pedras eram tantas    que até o ár se movia.
     --Guar`-te, guar`-te, ó meus villões,    não useis de vilania;
  36   arrancae melhores armas,    que eu por mim não fugiria;
     ao que espada não trouvesse,    a minha lhe eu já daria;
  38   com um só palmo de adaga    todos sete mataria.--
     Avança, e todos por terra,    bem mortos os julgaria;
  40   mas um dos sete que escapa    fundo golpe lhe daria.
     Aos gritos do cavalleiro    a dama logo acudia.
  42   --Quem te mata, Dom Aleixo,    quem matar-te mandaria?--
     --Mandaste-lo vós, senhora,    com traição e covardia!
  44   Não se me dá de morrer,    que vida assim mal servia;
     por minha mãe que é já velha,    eu só gritava e gemia.
  46   Bem certo dizer é esse,    que desde infante eu ouvia:
     perde quem anda de noite,    ganha quem logra de dia,
  48   perde quem tem seus amores    quando em donzellas se fia.
     Se d` ellas não me fiára,    tão cedo não morreria.--

Go Back
Back to Query Form