Pan-Hispanic Ballad Project

Total: 7


1668:1 Conde Antores (á)            (ficha no.: 743)

Versión de Felechas de Collada (ay. Boñar, p.j. León, ant. La Vecilla, comc. Boñar, León, España).   Recitada por una mujer y su marido, Justo Corral (75a). Recogida por Mercedes Cano, Michelle Débax, Concha Enríquez de Salamanca y José Luis Forneiro, 16/07/1986 (Archivo: ASOR; Colec.: Encuesta LEÓN 85; cinta: 1.16-7.1/A-12 y B-11). Publicada en TOL I 1991, pp. 130-131.  076 hemist.  Música registrada.

     Conde Niños pa la guerra    se tenía que marchar.
  2   --Si a los siete años no vuelvo,    a los ocho casarás.
     --No lo querrá el Dios del cielo    ni la Virgen del Pilar,
  4   que hasta mi conde no venga    yo no me pienso casar.--
     Ya se pasaron los siete,    la trataron de casar,
  6   con el lindo conde Alarcos,    en contra su voluntad.
     --Anoche he tenido un sueño,    no sé si será verdad,
  8   que mi esposo conde Niños    fuera de la morería está.--
     Al pasar un alto foso,    al pasar po` un arrabal,
  10   cuando ya viera sus vacas    marcadas de otra señal.
     --Dime, dime, pastorcito,    mi partorcito ideal,
  12   ¿de quién son estas vacas    marcadas de otra señal?
     --Son las vacas del conde Niños,    que en la morería está,
  14   y ahora son del conde Alarcos,    mañana se va a casar.
     Siete soldadas me deben,    ninguna me quién pagar.--
  16   Echa mano a su bolsillo    y un doblón de ocho le da.
     --Esto no es por la soldada,    esto es por una amistad.--
  18   Al pasar por un arroyo    y al pasar un ventanal,
     cuando ya vio la su suegra    asomada a un ventanal.
  20   --Mucho me alegro al verte,    pero más me alegro el mal,
     que a tu esposa Francisquita    la tratamos de casar
  22   con el lindo conde Alarcos    contra de su voluntad.--
     Siete vueltas dio al palacio    sin portero encontrar;
  24   de las siete pa las ocho,    ató el caballo a su rosal.
     --Este rosal y palacio    mío le puedo llamar.--
  26   Conde Alarcos, que oyó ésto,    quiso parecerle mal.
     Hablando en estas palabras,    trataron de merendar.
  28   --En el plato de la infanta    déjemele usted cortar;
     déjeme(le) dar seis vueltas,    como yo le solía dar.--
  30   --Dale una, Gerineldo,    dale dos y dale más,
     que mi marido ha de ser    y no me lo han de quitar.--
  32   Conde Alarcos, que oyó ésto,    un bofetón la fue a dar.
     Conde [Niños], que oyó ésto,    pronto se torna a falar:
  34   --Deténgase, caballero,    deténgase para atrás,
     siete años viví con ella,    nunca la hice tanto mal;
  36   la llevaremos al campo    a ver quien la ha de llevar.--
     Hasta la gente decía:    --Es su mujer natural.--

Go Back
1668:2 Conde Antores (á)            (ficha no.: 744)

Versión de Ribota (ay. Oseja de Sajambre, p.j. Cistierna, ant. Riaño, comc. Sajambre, León, España).   Recitada por Ignacia Simón (unos 60a). Recogida por Diego Catalán y Álvaro Galmés, 00/08/1946 (Archivo: AMP; Colec.: María Goyri-Ramón Menéndez Pidal). Publicada en RTLH 3 (1969), pp. 162-163, nº. IV. 12 y TOL I 1991, pp. 131-132.  087 hemist.  Música registrada.

     --Si a los siete años no vengo,    si a los siete años no más,
  2   si a los siete años no vengo,    a los ocho casarás.--
     A todo esto, la condesa    no cesaba de llorar.
  4   --¡Altos, altos, mis criados!,    haced lo que yo mandare,
     que anoche a la medianoche    mal sueño me quiso dar,
  6   o se casa la condesa,    o se trata de casar;
     sea sueño o no lo sea,    mi caballo aparejad.--
  8   Monta a caballo, camina,    corre como un gavilán,
     por aquellos campos verdes    corre como un gavilán.
  10   Al pasar de un arroyuelo,    al llegar a un arenal,
     se encuentra con las sus vacas    marcadas de otra señal:
  12   --Deténgase el pastorillo,    que le quiero preguntar
     que de quién son esas vacas    marcadas de esa señal.
  14   --Éstas son del conde viejo,    ¡Dios le deje descansar!,
     y ahora son del gran cornudo,    ¡no las allegue a gozar!,
  16   la soldada de siete años    no me ha querido pagar.
     --Deténgase el pastorillo,    más le quiero preguntar,
  18   ¿dónde está un toro pinto    que con ellas suele andar?
     --Lo vendió gran cornudo    mañanita de San Juan
  20   . . . . . . . . . . . . . . . . . . .    para los paños mercar.
     --Deténgase el pastorillo,    más le quiero preguntar,
  22   que si se casaron ya    o se tratan de casar.
     --Pues hoy se cosen los paños,    mañana se van casar.
  24   --Quédate con Dios, pastor,    con Dios te quieras quedar,
     te dejé vestío de paño,    sayo roto de sayal,
  26   como no me muera luego,    de seda te he de tornear.--
     Diera paso contra paso    donde las bodas están:
  28   --Buenos días, los señores,    Dios les deje descansar.--
     Y a todo esto, la señora    no cesaba de llorar.
  30   --¿Dónde es ese caballero    que tan culto es el hablar?
     --Marinero soy, señora,    que navego por el mar.--
  32   A todo esto, la señora    a él se fue a abrazar:
     --¡Éste es el mi marido,    que no el que me quieren dar!--
  34   Se recata el gran cornudo,    la trata de abofetear.
     --¡Alto, alto, gran cornudo,    no hagas la condesa mal,
  36   que mientras yo sea vivo,    no la has tú de maltratar!
     --¡Ay pobre de mí, cuitado,    nacido con tanto mal!,
  38   ya que la condesa `e marcha,    los paños vengán acá.
     --Los paños del gran cornudo    bien pagados están.
  40   --¡Ay pobre de mí, cuitado,    nacido con tanto mal!,
     ya que la condesa `e marcha,    zapatos de cordobán.
  42   --Entre besos y abrazos    bien pagados estarán.
     --¡Ay pobre de mí, cuitado,    nacido con tanto mal,
  44   no me ha dado más que uno    y ha sido a su pesar!

Go Back
1668:3 Conde Antores (á)            (ficha no.: 745)

Versión de Vierdes (ay. Oseja de Sajambre, p.j. Cistierna, ant. Riaño, comc. Sajambre, León, España).   Recitada por Tomasa Redondo (unos 65a). Recogida por Paul Bénichou, Paloma Díaz-Mas, Jon Juaristi y Beatriz Mariscal, 12/07/1985 (Archivo: ASOR; Colec.: Encuesta LEÓN 85; cinta: 3.12-7.1/B-12). Publicada en TOL I 1991, pp. 132-133.  067 hemist.  Música registrada.

     Cartas le vienen al conde    de la raya `e Portugal,
  2   que lo llaman a la guerra    de capitán general.
     La condesa ya lloraba,    no cesaba de llorar.
  4   --Ay, si te marchas, conde,    conde, ¿cuándo volverás?
     --A los siete años, condesa;
  6   si pa los siete no vengo,    a los ocho casarás.--
     De los siete años pa los ocho    mal sueño me quiso dar:
  8   o la condesa se casa    o mis tierras van a la mar.
    
(Él pidió el permiso, cogió un caballo y se puso en camino)
     Al salir de un río    y entrar en un arenal,
  10   me encontré con las mis vacas    marcadas de otra señal.
     --Alto, alto, pastorcillo,    yo le quiero preguntar:
  12   ¿de quién son estas vacas    marcadas de otra señal?
     --Éstas son del conde Viejo,    Dios lo llegue a perdonar,
  14   y ahora son del conde Niño,    que no las llegue a lograr.
     --¿Dónde está un toro pinto    que con ellas solía andar?
  16   --El toro pinto lo ha vendido conde Niño    para las vistas comprar.
     --¿La condesa se casó    o se trata(n) de casar?
  18   --Hoy se corren las vistas,    mañana se casarán,
     corra, corra, caballero,    si a la boda quier llegar.--
  20   Al salir de un río    y entrar en otro arenal,
     me encontré con las mis cabras    marcadas de otra señal.
  22   --Alto, alto, pastorcillo,    yo le quiero preguntar:
     ¿de quién son estas cabras    marcadas de otra señal?
  24   --Éstas son del conde Viejo,    Dios lo llegue a perdonar,
     y ahora son del conde Niño,    que no las llegue a lograr.
  26   [Al salir de un río    y entrar en un arenal,
     me encontré con las mis ovejas    marcadas de otra señal:
  28   --Alto, alto, pastorcillo,    yo le quiero preguntar:
     ¿de quién son estas ovejas    marcadas de otra señal?
  30   --Éstas son del conde Viejo,    Dios lo llegue a perdonar,
     y ahora son del conde Niño,    que no las llegue a lograr.]
    
(Él, cuando llegó, lo pasaron a una sala y ella no estaba allí; pero lo sintió hablar y ella preguntó:)
  32   --¿Quién es ese caballero    que tan corto es en hablar?
     --Marinero soy, señora,    que navego por la mar.
  34   --Pues tú serás el mi marido    y no el que me quieren dar.

Go Back
1668:4 Conde Antores (á)            (ficha no.: 746)

Versión de Posada de Valdeón (ay. Posada de Valdeón, p.j. Cistierna, ant. Riaño, comc. Valdeón, León, España).   Recitada por Gregoria Alonso. Recogida por Ramón Menéndez Pidal, 00/00/1909 (Archivo: AMP; Colec.: María Goyri-Ramón Menéndez Pidal). Publicada en RTLH 3 (1969), pp. 161-162, nº. IV. 11 y TOL I 1991, pp. 133-135.  088 hemist.  Música registrada.

     Cartas van y cartas vienen    a las orillas del mar,
  2   que llaman al conde Dirlos    por capitán general.
     Y allí estaba las condesa,    no cesaba de llorar:
  4   --¿Para cuándo, mi marido,    para cuándo volverás?
     --Si a los siete años no vuelvo,    ya te podrías casar.--
  6   Entre los siete y los ocho    la han tratado de casar,
     con otro conde muy viejo    que había en aquel lugar.
  8   --Déme licencia, buen rey,    si usted me la quiere dar,
     que me ha venido una carta    de muchísimo pesar,
  10   que mi padre se había muerto    y mi madre iba a expirar;
     déme licencia, buen rey,    para dirlos a enterrar.
  12   --La licencia, conde Dirlos,    por tuya la tienes ya.--
     Pone silla a su caballo    y encomienza a navegar,
  14   por unos montes alante,    por unas vegas allá.
     En el medio de unos montes,    un pastorcito alcontrar,
  16   que guardaba unas vacuelas,    marcadas de su señal.
     --Dime, dime, pastorcito,    dime y no me has de negar:
  18   ¿de quién son esas vacuelas,    marcadas en mi señal?
     --Del conde Dirlos, señor,    ¡Dios lo llegue a perdornar!,
  20   ahora son de un conde viejo,    ¡no las allegue a gozar!,
     ahora son de un conde viejo,    mañana se va a casar.
  22   --Dime, dime, pastorcito,    más te quiero preguntar:
     ¿adónde está un toro blanco    que entre ellas solía andar?
  24   --Lo ha vendido el conde viejo    mañanita de San Juan,
     para pañuelos de seda    para a la niña comprar.
  26   --Dime, dime, pastorcito,    dime y no me has de negar,
     si llegaremos bastante    donde las bodas están.
  28   --Pique su caballo espuela    y en tierra no ha de posar.--
     --Buenas tardes, los señores,    a todos en par en par.--
  30   Allí estaba la condesa,    no cesaba de mirar:
     --¿Quién es aquel caballero,    cortesano y no en hablar?
  32   --Soy marinero, señora,    que yo vengo de la mar.--
     Se levantó la condesa    y de él se fuera abrazar:
  34   --¡Éste, éste es mi marido    y no el que me quieren dar!--
     Se levanta el conde viejo    y la fuera abofetar.
  36   --¡Quítate de ahí, cornudo,    que no estoy a tu mandar!
     --Pues ya que llevas la niña,    pañuelos vengan acá.
  38   --Los pañuelos, el cornudo,    pagaditos están ya,
     los pagó el mi toro blanco    mañanita de San Juan.
  40   --Pues ya que llevas la niña,    zapatos de cordobán.
     --Los zapatos, gran cornudo,    bien pagados estarán,
  42   en besitos y en abrazos    bien pagados están ya.
     ¡Ay triste de mí, cautada,    mezclada con tanto mal,
  44   que no le he dado más que uno    y ése fue con gran pesar!

Go Back
1668:5 Conde Antores (á)            (ficha no.: 747)

Versión de Caín (ay. Posada de Valdeón, p.j. Cistierna, ant. Riaño, comc. Valdeón, León, España).   Recitada por Rosa Pérez Guerra (64a). Recogida por Alberto Alonso, Regino García Badell, Elena Hernández Casañas y Almudena Jimeno, 07/07/1985 (Archivo: ASOR; Colec.: Encuesta LEÓN 85; cinta: 2.7-7.2/A-06). Publicada en TOL I 1991, pp. 135-136.  050 hemist.  Música registrada.

    
(El conde Guirlos fue a la guerra y dejó la mujer y estuvo allá siete años y al cabo de los siete años)
     Un día estando durmiendo    muy mal sueño revelaba,
  2   y les dice a sus criados:    --No sé qué pasa en mi casa:
     o se casa la princesa    o mis tierras van por mal.--
     . . . . . . . . . . . . . . . . . . .    . . . . . . . . . . . . . . . . . . .
  4   --Dime, dime, pastorcito,    si te quieres explicar,
     ¿de quién son aquellas vacas    que tú solías cuidar?
  6   --Ahora son del conde Viejo,    no las llegue a disfrutar;
     primero eran del conde Guirlo,    mal patrón me vino a dar.
  8   --¿Dónde está ese toro blanco    que entre ellas solía andar?
     --Lo ha vendido el conde Viejo    para los paños comprar.
  10   Marche, marche caballero,    si quiere a tiempo llegar,
     hoy se preparan las fiestas,    mañana se casarán.
    
(Y llegó al pueblo. Y ella lo conoció. . . . . . Y se quedó mirando y se revolvió y dice:)
  12   --Este sí que es mi marido    y no el que me quieren dar.--
     Entonces el conde Viejo    se arremanga y le va a dar.
  14   --Estáte quieto, gran cornudo,    no la vas a abofetear,
     que en lo que yo sea vivo    no la traes a tu mandar.
  16   --¡Ay, triste de mí--decía--,    me inclino con tanto mal!,
     ya que no lleve la niña,    zapatos me venga acá.
  18   --Los zapatos, gran cornudo,    bien pagaos los tendrás ya,
     que entre besos y entre abrazos    alguno le habrás dao ya.
  20   --¡Ay, triste de mí--decía--,    me inclino con tanto mal!,
     que nunca le he dado más que uno    y ese fue con su pesar!
  22   --¡Ay, triste de mí--decía--,    me inclino con tanto mal!,
     ya que no lleve la niña,    los paños vengan acá.
  24   --Los pañales, gran cornudo,    bien pagaos los tienes ya;
     los pagó mi toro blanco    la mañana de San Juan.

Go Back
1668:7 Conde Antores (á)            (ficha no.: 2994)

Versión de Hermisende (ay. Hermisende, p.j. Puebla de Sanabria, comc. Sanabria, Zamora, España).   Recitada por Manuela Fernández Suárez (52a). Recogida por Aníbal Otero Álvarez, 00/12/1934 (Archivo: AMP; Colec.: Otero, A. (M. Goyri-R. Menéndez Pidal)). Publicada en Petersen-Web 2000, Texto. Reeditada en Petersen-Web 2000-2007, Texto.  070 hemist.  Música registrada.

     Cartas me vinieron, cartas,    cartas de grande pesar,
  2   que mi padre se ha muerto,    mi novia se va a casar.
     Le pedí licencia al rey,    no me la ha querido dar;
  4   se la pedí a la reina,    me respondió otra tal.
     Con licencia, que sin ella,    yo me tengo de embarcar.
  6   Me metí n`un hondo pozo,    fuí salir a un arenal;
     encontré una vacada,    pastando n`un peñascal.
  8   --¿De quién es esta vacada    cambiada de esta señal?
     --Antes era de conde Flores,    que Dios le ha de perdonar
  10   y ahora es de conde Niños,    ¡Dios no la deje gozar!;
     la soldada de siete años    no me la quieren pagar.
  12   --Guárdala tú, buen pastor,    como solías guardar;
     la soldada de siete años    a deber no se ha quedar.--
  14   A la salida de un monte,    a la entrada de un lugar,
     encontré con tres señoras    que se iban a pasear.
  16   --Dio-los ayude, señoras,    y a mi madre Dios la guarde.
     --Si tú eres hijo mío,    algunas señas me has de dar.
  18   --Aquí las traigo, madre mía,    sí, yo se las quiero dar:
     la espada del rey    con que he ido a pelear.
  20   Dígame usté, madre mía,    ¿qué nuevas me va a dar?
     --Las nuevas que te voy a dar,    hijo, te van a pesar,
  22   que tu padre ya se ha muerto    [. . . . . . . . . . . .]
     y tu novia doña Gómez    hoy mismo se va casar.
  24   Écheme la bendición, madre,    yo la voy a rescatar.
     --¡No vayas allá, hijo mío!,    tratarán de te matar.
  26   --Tengo andado por el mundo    y le he de saber hablar.-
     --Dio-los ayude, señores,    y a la novia, Dios la guarde;
  28   ¿si me permiten una palabra    que con ella quiero hablar?-
     Unos dicen --¡Maten, maten!    y otros: --Dejarlos hablar,
  30   que será el conde Niño,    que la vendrá a rescatar.
     --¡Paren, paren, caballeros,    justicias de este lugar,
  32   que los amores más viejos    son muy malos de olvidar!-
     La montara en el caballo,    prencipia de caminar.
  34   Unos dicen: --¡Maten, maten!    Otros: --Dejársela llevar,
     que será el conde Niño,    la vendrá a rescatar.

Go Back
1668:6 Conde Antores (á)            (ficha no.: 2672)
[0559 Vuelta del navegante, contam.]

Versión de Vinhais s. l. (c. Vinhais, dist. Bragança, Trás-os-Montes e Alto Douro, Portugal).   Documentada en o antes de 1928. Publicada en Martins 1928, I, 203-04. Reeditada en Costa Fontes 1997b, Índice Temático (© HSA: HSMS), p. 133, I7.  052 hemist.  Música registrada.

     FLá se vai o conde Torres    c` os mouros a batalhar;
  2   a mulher fica mui nova,    não cessava de chorar.
     O conde, que a ouvia,    sempre lh` ia procurar:
  4   --Que tendes, ó minha esposa,    não te posso afagar?
     Eu decerto vou p`r`à guerra    c` os mouros a batalhar;
  6   se eu por aqui tardar sete anos,    mulher, torna-te a casar.
     --Meu marido, esperarei    até tu poderes voltar.--
  8   Sete e sete são catorze,    e a mulher a aguardar;
     ò cabo de catorze anos    `terminou de se casar.
  10   Ora nesse mesmo dia,    conde Torres a voltar.
     No alto daquela serra,    quando ele vinha a regressar,
  12   encontrou um serraninho    uma vacada a guardar.
     Chamou pelo pastor dela,    respondeu-le o zagal.
  14   --De quem é esta vacada    que de golpe tem sinal?
     --Era de dom conde Torres,    Deus mo lo deixe voltar;
  16   agora vai p`ra Dom Francisco,    Deus la não deixe lograr.
     --Que te fez, ó pastorinho,    que le rogas tanto mal?
  18   --O jornal que me prometeu    ainda mo não quis pagar.
     --Guarda-a tu, pastorinho,    qu` eu ta virei a pagar.--
  20   Pensando na sua vida    pela serra foi andar,
     e logo ao fundo da serra    pôs-se a descansar.
  22   Vira `star três lavadeiras    num rigueiro a lavar;
     duas lavavam toalhas    e outras toucas de gomar.
  24   --Deus las guarde, senhoras,    Deus las queira guardar.
     --Donde era o cavaleiro    tão cortês no seu falar?
  26   --Sou filho dessa mais velha,    das outras primo carnal.-- . . .

Nota del editor: Como a maioria das versões portuguesas, esta variante continua com A Volta do Navegante (I9) [Vuelta del navegante 0559].
Título original: I7. O CONDE FLORES (Á).

Go Back
Back to Query Form