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La corneja se dirige a los animales
Atribuido a Miskin
Dinastía Mogol, hacia 1600 dC
India
Gouache sobre papel
27 cm x19.4 cm
Trasladado del Department of Oriental Manuscripts and Printed Books, British Library
Número de adquisición: # OA 1920.9-17.05

Imagen cortesía del British Museum (copyright reservado).

Aunque la ley islámica prohibía la representación de figuras animales y humanas en el arte, había una larga tradición preislámica de arte figurativo en el norte de la India que no podía reprimirse. Diseñadores, artistas y artesanos observaron cuidadosamente las restricciones en la arquitectura y otras formas de arte público, pero para las formas artísticas más privadas, incluyendo los suntuosos manuscritos iluminados como éste, se representaban comúnmente figuras animales, humanas e incluso divinas. Además, Miskin, el artista a quien se atribuye esta obra, era un hindú, no un musulmán. El emperador Mogol Akbar (r. 1556-1605) retuvo a numerosos pintores hindúes, así como musulmanes, en su entorno, en parte por su talento, pero quizás también a causa del hecho que su religión no les prohibía pintar el tipo de imágenes que Akbar requería.

Se cree que esta página ilustra una popular fábula de animales, en la que una corneja advierte al resto del reino animal del peligro de elegir al búho como su líder, un acto que tendría como resultado la eterna enemistad entre búhos y cornejas.1 La corneja puede verse encima del pico dirigiéndose a una multitud de animales, que incluye a pájaros, peces, insectos y animales más grandes, como leones, cocodrilos y elefantes. También están presentes figuras míticas como el dragón y el fénix, o simurgh, tal y como es conocido en el mundo islámico, que aparece en la parte derecha del pico. Estas últimas dos criaturas demuestran el impacto de los motivos chinos, probablemente tomados del patrimonio Mogol Timurid.

Como la página web del British Museum explica, las fábulas de animales con moraleja al final eran una manera tradicional de enseñar lecciones de moralidad a los jóvenes, como en las fábulas de Esopo. Se dice que el emperador Mogol Akbar (r. 1556-1605) apreciaba especialmente este género, y ordenó una copia ilustrada de una de estas colecciones llamada Anvar-i Suhayli ('Luces de Canopus'). Más tarde encargó una versión más simple de las mismas historias para sus hijos pequeños, `Iyar-i Danesh (Perlas de Sabiduría).2

Traducción de Alexandra Prats, revisada por Dolors Folch

(1) Ver la página web del British Museum dedicada a este objeto.

(2) Ibid.